En el marco de la convocatoria Proyectos Federales de Innovación Productiva (PFIP) del Consejo Federal de Ciencia y Tecnología (COFECyT) se llevó a cabo un proyecto con el fin de resguardar los fangos naturales de Copahue.
Dirigido por la Dra. Miria Baschini el proyecto fue gestionado integramente por la UVT de la UNCo e involucró al laboratorio de Aguas y Arcillas que depende del departamento de Química de la Facultad de Ingeniería, el grupo GEMA, que forma parte del Probien, Instituto de doble pertenencia (Conicet-UNCo) y el Ente Provincial de Termas del Neuquén.
La propuesta planteaba orginalmente producir en escala experimental primero y productiva después, fangos madurados usando las aguas termominerales de Copahue y arcillas procedentes de yacimientos cercanos, de tal modo que se obtenga un producto apto para uso en terapéutica y estética que pueda ser distribuido hacia otros centros de tratamiento y usado en aplicaciones en épocas el año en las cuales la estación termal permanece cerrada por razones climáticas.
Finalmente los investigadores de la UNCo y el EPROTEN lograron convertir el recurso no renovable (fango termal) en uno renovable mediante la utilización de peloides sintéticos con arcillas seleccionadas y aguas mineromedicinales, logrando una produccipion a escala experimental. En el Área Geotermal Copahue se llevó a cabo el proceso de maduración de los fangos en piletones y en el laboratorio de Aguas y Arcillas de la UNCo, en Neuquén Capital, se realizaron las determinaciones experimentales para el seguimiento y evaluación del proceso de maduración.
La maduración de fangos consiste en trasladar determinadas arcillas que se encuentran en la región hasta Copahue y colocarlas dentro de una laguna con aguas propias de este sistema termal. Una vez allí, personal del EPROTEN se ocupa de mezclarlas y agitarlas de forma periódica mientras que en el laboratorio de la UNCo se realizan los ensayos a distintos tiempos una vez empezado ese proceso de maduración.